Desafío del Atlantico - Mirador do Ezaro

Nos levantamos temprano un sábado para viajar hasta Dumbría. Nos esperaba un día muy duro. Y no fue para menos. Llegada y firma de dorsales en plan profesional. Cafecito y a ponerse los bartulos para rodar 130kms. Y está lloviendo. ¡Nos vamos a mojar!

Después de 60kms llegamos, empapaos, al Faro de Finisterre. Había que reponer fuerzas, aunque me encontraba genial. Fotito en el Faro, aprovechando un maquinón que había por allí. Y después de un buen rato esperando a la gente. Tocaba otra buena tirada. Esta vez calados hasta los huesos. Los primeros kms, congelado intentando entrar en calor y, en un despiste, ¡al suelo!. No pasa nada, toqué la rueda de un compañero y me fui al suelo. Seguimos rodando y empiezo a notar que el cambio está jodido. Parece como si le faltase una pieza. Me preocupa para Ezaro.

Durísimo rompepiernas en la segunda parte del recorrido con unos 15 últimos kms rodando a gran ritmo.

Empieza la subida, y el cambio no va. Noto como me roza con la rueda si lo pongo a tope. Y en la subida toca darle a tope. 

Me cago en todo pero saco fuerzas de flaqueza y decido acabar como buenamente puedo. 

 Llego a meta, destrozado y con la bici tocada en 5h28min y entrando en un meritorio puesto 122.

Disfruntando de lo lindo en esta carrera, pero con la seguridad de que no volveré. Es muy duro el esfuerzo.